La familia Aguirre vende el emblemático hotel Alay tras 48 años al frente del mismo
El emblemático hotel Alay, el primer establecimiento de la Costa del Sol con salones para eventos y congresos, ha dejado de ser propiedad de la familia Aguirre, unos pioneros del turismo y visionarios de la necesidad de que no solo había que centrarse en el sol y playa, sino que era preciso crear nuevos productos para tener actividad todo el año, según confirmaron fuentes de la familia Aguirre. El Alay es uno de los pocos hoteles históricos de la Costa que se mantenía en manos de la saga familiar que vio nacer el negocio.
Fue Fermín Aguirre, un empresario vasco, quien construyó este cuatro estrellas con múltiples salones para reuniones, que se hizo célebre a nivel internacional por su hall para eventos. A ello le sumó un edificio de apartamentos y posteriormente un restaurante de gran categoría. Ahora, a punto de cumplir 48 años de actividad timonada siempre por la saga de los Aguirre, un inversor particular presentó una oferta para hacerse con el establecimiento hotelero. Estas mismas fueron aseguraron que tras estudiarla consideraron que era una propuesta razonable y sellaron el cambio de accionariado. Tras ello, los nuevos propietarios han encargado la gestión del hotel a la cadena Ibersol, que ya comecializa este establecimiento en su ‘web’. Este grupo tiene escasa presencia en la Costa del Sol, pero con gran arraigo en la Costa Dorada, en la Brava y en Mallorca. Esta cadena ha tomado ya las riendas de un negocio ubicado frente a Puerto Marina, en Benalmádena, y junto a la playa y el paseo marítimo.